Era un sábado cualquiera, habíamos planificado ya los menus del fin de semana y me fui al REWE a hacer la compra. Normalmente en la pescadería no hay cola, pero esta vez había una gentil abuelita delante mío. Me toca el turno. Y la chica, una dependienta jóven, rubia con una amplia sonrisa me dice.…
Una Española en Múnich
Como ser una Española, vivir en Alemania y no morir en el Intento! Ahora en Holanda