En invierno las temperaturas alcanzan los negativos muy rápidamente, y las plantas que hemos estado cuidando tan tiernamente durante los días de calor puede sufrir y morir. Así que si no tenemos un jardín dónde las raíces de las plantas estén protegidas por la tierra y la nieve, necesitamos proteger las plantas y mantener una temperatura óptima de la tierra para que sobrevivan.
Para que la planta se mantenga viva durante los cuatro o cinco meses de invierno con temperaturas frías, se la envuelve con rafia o una tela especial, que aquí se llama «Pflanzen Winterschutzvlies» y la atamos bien con una cuerda para que el viento no se lleve la protección en dos días. Durante el invierno aunque las plantas estén envueltas hay que regarlas como habitualmente para seguir nutriéndolas.
Hay dos tipos de «Winterschutzvlies», los que protegen las hojas y las plantas que suelen ser una tela blanca (para rosales en los jardines y otras plantas delicadas), y los que protegen las macetas y la tierra que suelen ser de rafia marrón. Se pueden utilizar ambos a la vez o por separado.
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Buenos días
Qué suerte tienen tus plantas. Las mías están condenadas a vivir conmigo … y a morir lentamente. Soy un auténtico desastre.
Saludos desde Leipzig 😉