Hoy sábado 13 de noviembre de 2010 había en la ciudad de Múnich una manifestación espontánea de los nazis alemanes, unos 100, que no oficial, pero que todo el mundo lo sabía y cómo en cada manifestación de los nazis, que aquí en Alemania se pueden manifestar porque todo ciudadano tiene derecho a manifestarse, la ciudad de Múnich siempre crea una contramanifestación, que es contra los nazis y no contra su derecho a manifestarse. Este año el lema volvió a ser «München ist bunt» que quiere decir, «Múnich es de colores» y con este lema en las manos, literalmente, 3.000 personas salieron a la calle a gritar la multiculturalidad de la ciudad, y su oposición a la extrema derecha.
Los neonazis escoltados por la policía vestida de negro estuvieron durante cuatro horas paseándose por la ciudad de Múnich, esta vez eligieron las orillas y los barrios cercanos al río Isar cómo Lehel para gritar sus lemas fascistas y anti multiculturalidad. Los manifestantes contra los nazis y pro «München ist bunt» estuvieron escoltados por la policía vestida de verde, e intentaron rodear a los nazis y acercarse a ellos (sin conseguirlo) para gritarles que se marcharan de la ciudad, que no les gustaban sus ideologías y que no los querían ver manifestarse. Lo que más se podía escuchar fue «Nazis raus». Algunos de ellos también un extremistas y vestidos enteramente negros, con la cara tapada con gorros, bufandas y gafas también de negro intentaban estrategias para combatir físicamente a los nazis. Hubo momentos de brotes de violencia, pero fueron enseguida amainados por la policía que muy ábilmente rodeaba cada metro cuadrado de la manifestación.
En la manifestación contra los nazis se encontraban habitantes de Múnich pacíficos que apartados de los grupos violentos querían mostrar con su presencia su descontento hacia los nazis. En las siguientes fotografías podéis ver lo que yo ví en primera persona, y cómo se organiza en Múnich una manifestación pro el nazismo y una contramanifestación pro la multiculturalidad durante cuatro horas, con alto riesgo y con alta presencia policial. Tengo que decir que cuando cruze el cerco policial para meterme en el meollo de la manifestación «München ist bunt» me registraron la mochila y enteramente a mi. La seguridad era total y nada se dejaba al azar, incluso había cámaras grabando a los manifestantes en cada rincón de la manifestación.