El vino jóven en español, «vin nouveau» en francés, pero en realidad es como una especie de mosto sin fermentar, pero yo más bien diría que se parece a la sidra, sobretodo a la «cidre breton» aunque procedan de distinta fruta (la sidra de la manzana), el tipo de burbuja, la consistencia, y el dulce sabor hacen que se parezca mucho más a una sidra que a un vino.
Aquí en Múnich se puede degustar este vino en que es ahora su temporada en muchos restaurantes, pero yo aconsejo ir a la Pfälzer Residenz Weinstube (en Odeonsplatz), que es el mayor lugar de Múnich para degustar vinos (tienen una carta de vinos inmensa de todos los países que queramos, incluyendo España, Chile, Argentina, California, etc). Para los que ya sean adictos, se pueden encontrar en el HIT, REWE, etc.. en su versión vino jóven blanco o vino jóven rosado. La botella cuesta entre 1,50€ y 2€. Aviso que ya quedan en pocos sitios, y no se conserva mucho tiempo, así que máximo si se compra es a consumir en una semana. Tengo que decir que están riquísimos!