Saliendo de Múnich hacía sol, al llegar al trabajo estaba nublado y hacía un frío de pelar! Ahora parece que las nubes se van levantando, pero estamos teniendo un verano de primavera… curioso que justo cambiara cuando cambiamos la estación y no antes.
El sábado aunque cueste creerlo hicimos 60km y no no movimos de los límites de la ciudad de Múnich!! Es enorme la ciudad y no te enteras, vas y vas y vas… y como no acaba pues sigues yendo. Desde el oeste-centro hasta el norte, del norte al centro, del centro al oeste, del oeste al este, del este al sur, y del sureste al centro y del centro al oeste. Así de mareados terminamos, llegando a la una a casa, y con ganas de no hacer más ejercicio.